¿Por qué leer más libros? Lecciones de Warren Buffett
Warren Buffett, conocido por ser el mejor inversionista del siglo XX, también es uno de los hombres más ricos del mundo, con un patrimonio de $96.3 billones. Estaba impartiendo una charla frente a 165 estudiantes de la Universidad de Columbia.
Uno de los estudiantes levantó la mano y le preguntó a Buffett qué pensaba sobre la mejor manera de prepararse para una carrera de inversión. Después de pensar por un momento, Buffett sacó una pila de papeles e informes comerciales que había traído consigo y dijo: “Lee 500 páginas como estas todos los días. Así es como funciona el conocimiento. Se acumula, como el interés compuesto. Todos ustedes pueden hacerlo, pero les garantizo que no muchos de ustedes lo harán”.
¿Cuál es el secreto de este señor para leer más libros?
Warren Buffett dice: “Me siento en mi oficina y leo todo el día”. Buffett estima que el 80% de sus horas de trabajo las dedica a leer o pensar. Podríamos intuir que la razón principal por la que lee. Es para encontrar un libro similar a “El inversor inteligente” de Benjamin Graham.
Según Buffett, fue la mejor inversión que ha hecho en su vida, comprar ese libro.
Así es, un libro
En mi vida podría decir que he tenido libros con un impacto similar, por supuesto, no en la misma magnitud que a Buffett. El economista Tyler Cowen acuñó el término “libro terremoto”. Es una selección de libros que han transformado la forma en la que diriges tu vida. Haciéndote una persona más enfocada, feliz y con éxito profesional.
No importa en qué situación estés o los problemas que enfrentes. Ya han sido solucionados en un libro por gente mucho más inteligente que tú.
En palabras del dramaturgo James Baldwin: “Crees que tu dolor es tan único, pero luego lees”.
La gente ha tenido que mudarse a otra ciudad, llenar papeles de divorcio por una infidelidad, presenciar la muerte de un ser querido, empezar un negocio, dejar su trabajo, perder sus propiedades. Todo eso ha sido escrito incontables veces, por personas de alta cuna y por otras que mendigaron en la calle.
Existe, está escrito en el dispositivo más trascendente que ha creado la humanidad.
Un libro.
Cómo leer más libros: 3 Pasos para crear el hábito
Nadie se pregunta cómo tener tiempo para el sexo, ni cómo tener tiempo para comer. Simplemente, creamos el tiempo.
Paso 1: Acumular libros en la lista
El primer paso es cambiar la mentalidad respecto a un libro. Dejar de verlo como una obligación o una tarea que tachar de la infinidad de tareas del día. Es una prioridad. Como dijo una vez Erasmo, el erudito del siglo XVI: “Cuando tengo un poco de dinero, compro libros. Y si me queda algo, compro comida y ropa”.
No es necesario llegar a ese nivel, ya que hay libros bastante económicos e incluso gratuitos en internet.
¿Qué libros deberías comprar?
Si existe un libro que te llama la atención, aunque sea mínimamente, cómpralo.
Si aún no estás seguro de qué leer, hay formas de conseguir nuevas recomendaciones de libros:
- Preguntarle a un amigo o colega (de preferencia al más listo del salón).
- Sacar libros de las bibliografías (o seguir las recomendaciones del autor).
Construye una librería que te haga sentir orgulloso. En palabras de Cicerón: “Una casa sin libros es como un cuerpo sin alma”. Incluso si tienes decenas de libros pendientes por leer. Esto se llama “antilibrería”, un concepto acuñado por Ryan Holiday. Se trata de la humildad que te da tener muchos libros pendientes de digerir su conocimiento.
Paso 2: Leer esos libros
Leer libros debería ser naturaleza humana, una necesidad biológica. Como beber, dormir y respirar. No es una obligación ni responsabilidad, es más bien un reflejo o un impulso.
Lleva un libro contigo todo el tiempo, ábrelo cuando tengas un segundo. En lugar de jugar en tu teléfono para pasar el tiempo, usa ese tiempo para leer. Lee cuando estés comiendo, cuando estés en la sala de espera de una clínica, cuando estés en la cola del banco, cuando estés aburrido en la oficina.
Paso 3: Ser tajante en obtener sabiduría de los libros
Para esto hay dos ideas controvertidas:
#1 No es necesario consumir un libro de inicio a fin.
La gente que lee muchos libros, renuncian a muchos libros.
La gente que lee pocos libros, se quedan leyendo el mismo libro.
Si estas leyendo el mismo libro por 6 meses, es hora de dejarlo y buscar otro. No tienes la culpa, el escritor hizo un mal trabajo en comunicarse y atrapar tu atención.
Si pierdes el interés, déjalo y cambia a otra cosa. La vida es muy corta para leer libros aburridos.
#2 Busca temáticas distintas a tu trabajo
Sumérgete en otras temáticas que no estén relacionadas con el proyecto que tienes delante. Esto te puede servir para tener ideas frescas, otro punto de vista, un momento de descanso para tu cerebro.
Al final de cuentas, la creatividad se basa en conectar ideas nuevas con antiguas.
¿Cómo leer más y entender mejor?
Usa la marginalia para no olvidar lo aprendido
“El cerebro se hizo para tener ideas, no para almacenarlas”- David Allen.
No leas de forma pasiva. Más bien, toma notas, sé activo en el proceso.
Los libros no son reliquias sagradas, rayalos, toma notas, manchalos, desgránalos. Es tu libro y quieres obtener la mayor cantidad de información posible.
Aunque no lo hagas por ser escritor. Tomar notas, guardar historias y tener citas interesantes puede serte útil. En conversaciones, presentaciones, pitches de venta, etc.
Leer me encanta más que cualquier otra cosa. Pero sería un desperdicio si dejase que toda esa sabiduría se acumulara en mi cabeza y se degradara con el tiempo. Por lo mismo, he guardado lo mejor en cuadernos y notas.
Empieza ahora y conviértete en un lector constante
“No todos los lectores son líderes, pero todos los líderes son lectores”. -Harry S. Truman
Después de todo, los beneficios de leer un libro son personales e intrínsecos.
Dejando de lado el vasto conocimiento. Te ayudan a relajarte, a pensar mejor, a separar tu mente del ruido de un mundo saturado de información. Si he podido aprender sobre las biografías de la gente más exitosa del planeta es esto:
- Tienen un amor absoluto por los libros
- Son adictos al aprendizaje, en principio autodidacta.
Los grandes líderes de la historia han sido lectores, en tiempos en los que leer era mucho más complejo que ahora. Los textos no tenían traducciones y no pasaban por un proceso de edición.
Lincoln solía tener sus apuntes en un trozo de madera. Ahora tenemos, un Kindle y librerías digitales a un solo clic. Los libros están en oferta e incluso gratuitos en el idioma que queramos con reseñas de personas que han leído el libro.
El único impedimento que nos puede detener a leer, somos nosotros mismos.